Los inversores han tenido una semana intensa, marcada por el regreso de la retórica arancelaria del presidente Donald Trump, cifras económicas mixtas y la anticipación por resultados clave de empresas. A pesar de las nuevas amenazas comerciales, los mercados bursátiles parecen mostrar signos de agotamiento frente a la narrativa arancelaria, mientras mantienen el entusiasmo por las buenas perspectivas empresariales.
Trump intensificó su postura comercial esta semana con una nueva ola de aranceles. Impuso un gravamen del 50% sobre las importaciones de cobre, lo que impulsó las acciones de Freeport-McMoRan casi un 5% en la semana, en paralelo con un alza del 10% en los precios del cobre desde el lunes. Además, el mandatario emitió cartas advirtiendo de nuevos aranceles del 25% a Japón y Corea del Sur, del 50% a Brasil, y del 35% a Canadá, a partir del 1 de agosto. Aquellos países que no reciban cartas estarán sujetos a tarifas de entre el 15% y 20%, por encima del actual 10%.
Sin embargo, la respuesta de los mercados ha sido contenida. El S&P 500 y el Nasdaq alcanzaron nuevos máximos históricos el jueves, con señales claras de que los inversores podrían estar desarrollando una suerte de “fatiga arancelaria”. Un informe reciente de Bank of America reveló que los clientes muestran escasa preocupación por los riesgos económicos o la sobrevaloración de las acciones, lo que sugiere un fuerte apetito por el riesgo.
Mientras tanto, los resultados corporativos también están influyendo en el sentimiento. Delta Airlines sorprendió positivamente con un incremento del 12% en sus acciones, tras publicar resultados optimistas que refuerzan la resistencia del consumidor estadounidense y del sector corporativo. Levi Strauss también se unió al optimismo, al elevar su previsión anual de ventas y asegurar que los aranceles no afectarán significativamente su negocio este año, lo que impulsó sus acciones un 7%.
Sin embargo, no todas las acciones han acompañado el rally. Netflix ha estado bajo presión, con una caída del 5,5% en lo que va de julio, en contraste con la subida del 1,7% del S&P 500. Aunque los analistas no parecen especialmente preocupados, el mercado observa con atención el próximo informe de resultados de la compañía, previsto para el 17 de julio. Algunos, como la analista Laura Martin de Needham, han elevado sus proyecciones de precio objetivo y mantienen una visión positiva basada en la escala global de la empresa y su disciplina en gasto de contenido.
A pesar del entusiasmo generalizado, algunas voces advierten sobre una especulación excesiva. El estratega jefe de Interactive Brokers, Steve Sosnick, describió la situación actual como una «huida total hacia activos especulativos», advirtiendo que los inversores podrían estar ignorando señales clave de riesgo.
Fuente: Yahoo Finance