El oro registró ganancias este jueves mientras los inversores aguardaban el reporte de inflación en Estados Unidos que podría definir el rumbo de las tasas de interés, en un contexto marcado además por la creciente incertidumbre sobre la independencia de la Reserva Federal.
El informe de gasto en consumo personal (PCE) —el indicador de inflación preferido por la Fed— se publicará el viernes y se espera que muestre el mayor ritmo anual de aumento en cinco meses. Esto limitaría el margen de la Fed para recortar tasas, a pesar de que los mercados de swaps todavía descuentan una probabilidad superior al 80% de un recorte en septiembre, tras las señales recientes del presidente Jerome Powell.
El panorama se complica con la histórica disputa legal abierta luego de que la gobernadora de la Fed, Lisa Cook, demandara al presidente Donald Trump por intentar destituirla bajo acusaciones de fraude hipotecario. Si Trump logra su objetivo, obtendría una mayoría en la junta de la Fed, lo que genera preocupación en los mercados sobre una pérdida de independencia del banco central y un eventual repunte inflacionario, factores que aumentarían el atractivo del oro como activo refugio.
El metal precioso se ha mantenido en un rango desde que superó los 3.500 dólares por onza en abril, impulsado por tensiones geopolíticas, flujos hacia fondos cotizados en bolsa y las compras de bancos centrales que buscan diversificar sus reservas. Este jueves, el oro subió 0,6% a 3.416,85 dólares por onza en Nueva York, mientras que el índice Bloomberg Dollar Spot cayó 0,3%. La plata, el platino y el paladio también avanzaron.
Fuente: Bloomberg
